Esta semana continuamos por la senda que comenzamos la semana pasada reflexionando sobre el crecimiento persona desde una visión más científica. Para ello vamos a fijarnos en las enseñanzas que un gran sabio, el Doctor David R Hawkins, nos regala en su gran obra «El poder contra la fuerza»
David R. Hawkins fue doctor en Medicina y en Filosofía, con más de cincuenta años de experiencia clínica director del Instituto de Investigación Teórica y Espiritual Avanzada y Miembro vitalicio de la Asociación Psiquiátrica Americana.
Como se puede intuir en el título de su obra «El poder contra la fuerza», este experto nos propone afrontar la vida desde una perspectiva diferente, y nos recomienda dejar de usar la fuerza y sustituirla por el poder. Para aclarar un poco el concepto y a modo de “super-resumen”, la fuerza la asocia a lo podríamos llamar energías con vibraciones más básica asociadas a la pelea y en cambio el poder lo relaciona con energías de vibraciones más elevadas relacionadas con la Felicidad, la Alegría o el Amor.
Y en este marco, traigo una gran distinción que nos ofrece en su libro y que dice así: «La fuerza puede traer satisfacción, pero solo el poder trae alegría» Veámoslo más en detalle porque en una sola frase hay mucha esencia que aprender.
Antes de nada, por si no lo conoces, una de las grandes aportaciones del Doctor Hawkins es su escala de niveles de consciencia calculados mediante la técnica de la kinesiología, que como sabes es una técnica que permite la detección de malas distribuciones de las vibraciones y tensiones mecánicas del cuerpo humano y se utiliza para la detección del ajuste ideal de la estimulación por resonancia electromagnética. Utilizando esta técnica, que ha sido probada y corroborada por diversos estudios y millones de calibraciones y consultas, el Doctor Hawkins ha comprobado que existe una escala de diferentes niveles de consciencia para medir nuestro estado actual en la escala evolutiva, y nos puede decir en qué lugar nos hallamos en cuanto a nuestras actitudes internas entre un nivel de 20 y 50 para personas que consideran la vida como algo miserable, maligno o desesperanzador y de 540 hasta 1.000 para aquellos que viven la vida desde la paz, el amor o la alegría.
Te adjunto un resumen de la escala y para entenderlo mejor, y con el perdón de los expertos por la simplificación, vamos a imaginar por un momento que la escala que nos propone Hawkins es como una escala de premios, en la que si somos muy «listos e inteligentes» utilizamos una energía asociada a la fuerza y nos premian con 20 puntos, pero si somos «sabios y conscientes» podemos utilizar la energía del poder y conseguir hasta 1.000 puntos. Evidentemente esto es una simplificación pero mi intención utilizando hoy este marco es que nos ayude a comprender que nuestro nivel de consciencia está muy relacionado con nuestra forma de ver la vida y con las emociones que utilizamos a la hora de actuar y obtener resultados.
Volvamos pues de nuevo a la frase «La fuerza puede traer satisfacción, pero solo el poder trae alegría». Estarás de acuerdo conmigo que la satisfacción nos puede sonar a algo atractivo y muchos de nosotros nos movemos muchas veces desde este nivel. El problema es que cuando actuamos bajo el efecto de la satisfacción algo nos pasa que no nos termina proporcionando la tan ansiada felicidad. Según la escala del Doctor Hawkins, esto se produce porque, dentro de su escala el deseo calibra 125 y aún está afectada por otra energía de mayor nivel que es la ira que calibra a 150, el orgullo a 175 y por encima de estás dos está la energía asociada al coraje, la neutralidad, la voluntad, la aceptación o la razón y solo después de superar todos estos estados llega el Amor, la alegría y la paz que son las energías que realmente nos pueden llevar a la plenitud y a lo que el doctor Hawkins llama la iluminación.
Para poder salir de este nivel de vibración más básico que es la satisfacción, y asomarnos a niveles de mayor vibración como es la alegría, es necesario mirar especialmente en lo más profundo de nuestro interior y analizar con qué tipo de energías nos movemos. Se trata de soltar todo lo que duele y saber que el objetivo final de lo que estás haciendo esta simplemente en lo que estás haciendo. Para esto hay que tener en cuenta que el nivel de resolución que tiene tu vida depende del nivel de complejidad que tú le otorgues y que cuanta más fuerza utilices para intentar conseguir las cosas, más pelea te supondrá utilizar para conseguir un resultado más bajo. Mientras que cuando utilizas el poder de la Alegría, la Paz y el Amor, las cosas fluyen con mucho menos esfuerzo, con menos gasto de energía vital y obtienes resultados mucho más elevados.
Visto así la diferencia está en hacer algo desde la fuerza y movido por el deseo para recibir un premio de 125 frente a la posibilidad de aprender a utilizar el poder y obtener a cambio un premio de Amor, Alegría y Paz que suponen un mínimo de 540 o incluso 1.000 puntos. Como siempre te animo a que no te creas nada de lo que te digo, que lleves a la práctica toda esta teoría y compruebes por ti mism@ los resultados en alguna situación con la que “te estés peleando” actualmente y a la que le puedas poner un poco de alegría!!
Feliz semana!!!